Cosecha: la cebada, tarde pero seguro

La cosecha viene retrasada en la región del Sudeste y, en general, el cultivo está rindiendo por arriba de lo esperado. Hacia Dorrego se dieron los rendimientos menores y con exceso de proteína, aunque también hubo excepciones. Hacia San Cayetano anduvo muy bien y con resultados dispares en cuanto a calidad

En un año caracterizado por la heterogeneidad en la distribución de las lluvias en las regiones donde se hizo cebada, los resultados que se vienen obteniendo replican el comportamiento de las precipitaciones. Aunque apurando una síntesis de cómo ha venido hasta ahora la cosecha, en general, en Tres Arroyos y su zona de influencia se puede decir que la trilla es mejor de lo esperado.

El momento de la cosecha y el porcentaje de lo que se lleva recolectado marca el primer patrón de la campaña. De Dorrego hacia abajo, la trilla está finalizada, en cambio, de Tres Arroyos hacia Chaves y San Cayetano todavía queda alrededor de un 40% de la superficie por levantar. En un año más normal desde climático, la trilla ya estaría finalizada. Un diciembre con distintos eventos de lluvia en todas las zonas no está dejando que las cosechadoras puedan generalizar su trabajo.

Voces y zonas

“De Tres Arroyos para el lado de Dorrego ya prácticamente se terminó con rindes cercanos al promedio o un poco por debajo. Depende la zona y depende el lote, los rendimientos van de los 2.500 hasta los 5.000/5.300 kilos con calidades muy variadas, pero en general bajo calibre y excesos de proteína”, detalló el ingeniero Matías Fik.

“La calidad muy floja para lo que es una cebada cervecera y con lo justo entra para forrajera, y eso es debido a la falta de lluvia que hubo en todo el ciclo del cultivo, pero sobre todo en el final, en el llenado”, explicó el asesor privado.

“Mientras que de Tres Arroyos hacia el este los rindes son totalmente diferentes, hay rindes muy altos, aunque se ha cosechado muchísimo menos, debe ir un 50% de la superficie”, indicó.

En el mencionado sector los rindes están por arriba de los 5.000 kilos, con lotes de hasta 7.500 kilos.

En cuanto a la calidad, es muy diversa. “En general tenemos muy buen calibre, muy buen peso hectolítrico y proteína de baja a muy baja. Pero para los rindes que se están hablando y para la fertilización que se utilizó en general, la proteína uno esperaría que fuera muchísimo más baja de lo que en realidad está siendo”, completó.

El ingeniero Gonzalo Rodera, asesor de la Cooperativa Agraria, brindó un panorama similar: “Hacia Oriente y Dorrego los rindes han estado por debajo del promedio. En cambio, hay muy buenos rindes hacia San Mayol, Chaves, Ochandio, San Cayetano y Orense mismo. En esas zonas se están dando rindes por encima de lo normal”.

En tanto, en el ámbito de la Cooperativa de Cascallares, los resultados han sido positivos. “En principio, y en rasgos generales, buenos rindes y buena calidad. Mejor de lo esperado”, indicaron desde el departamento agronómico de la entidad.

“En las zonas de Copetonas, Oriente y parte de Cascallares, los rindes fueron los esperados y fueron peores que la campaña pasada. En muchos casos con exceso de proteína”, describieron. “De Cascallares a Tres Arroyos hubo lotes más irregulares, pero mejores rendimientos”, agregaron. “De Tres Arroyos para Chaves, San Mayol, El Carretero y San Francisco los resultados están muy por encima de los esperados: hablamos de buenos rindes y buena calidad”, completaron.

Con un 70% de la superficie cosechada por los productores asociados a la Cooperativa Alfa, su presidente Juan Ouwerkerk, indicó que los rindes “dieron la sorpresa, porque están un poco por arriba de lo que se pensaba”.

“Si bien para el lado de Oriente y Copetonas y algunas otras zonas los rendimientos no fueron gran cosa y con problemas de calidad, creo que en general la cosecha va a ser buena. Y en algunas zonas muy buenas: para el lado de San Mayol, San Francisco, Orense, por ejemplo”.

San Cayetano

En los campos de San Cayetano, la cebada está dando muy buenos rindes. “El promedio está en 5.000 kilos, hay lotes de 6.000 y también de 7.000 en partes buenas de algunos lotes”, contó el ingeniero Martín Lanceta, técnico que está a cargo de la oficina de INTA en ese distrito.

Con un promedio de lluvias que ronda los 750 milímetros cuando la media del partido es algo más de 800, el ingeniero explicó que “el agua cayó siempre justo”. Además, comentó: “La cebada no es un cultivo que demande mucha agua, así que se las arregló con lo que llovió. Sí puede haberla favorecido es que las lluvias quizás se dieron en los momentos de más demanda del cultivo, en los estadios críticos. Y también puede haber ayudado que las temperaturas no fueron muy altas, que eso también perjudica y acelera el proceso de llenado”.

La excepción a la regla

El ingeniero Gustavo Thiessen, que se mueve principalmente en Dorrego, pintó un buen panorama en los campos de sus asesorados. “La cebada fue una sorpresa para bien, mejor de los rindes que se esperaban, y a su vez en algunos casos, hasta con calidad, cosa que llamó la atención”, comentó.

“Hablamos de 1.200 kilos en la zona de Bahía Blanca, arriba de 2.000 kilos en zona de Las Oscuras; entre el cruce a Monte Hermoso y Dorrego, 3.000 kilos, en Aparicio 3.500 kilos, y también arriba de 4.000 kilos. Eso sería un parámetro, por lo cual es mejor de lo esperado”, describió.

Para Thiessen se trata de una cosecha hasta ilógica: “Uno de mis clientes hizo 700 hectáreas, y tuvo 4.500 de promedio y con calidad. Otro cosechó 4.000 kilos y también con calidad. En la condición que se dio, que fue sin agua de septiembre a noviembre, es algo inaudito”.

A nivel país

“En Argentina, la cosecha se encuentra en pleno desarrollo, alcanzando al momento alrededor del 60% de la superficie total, que ha sido estimada en 1,15 millón de hectáreas. De acuerdo a los rindes se espera una producción de entre 4,4 y 4,6 millones de toneladas”, indicaron en su último informe los ingenieros Fidel Cortese y Mario Cattáneo, especialistas en el cultivo cervecero.

“Se observan bajos rendimientos con calibres bajos en el sudoeste de Buenos Aires y en la región norte. En el centro norte y oeste de la provincia de Buenos Aires se observa marcada heterogeneidad en los lotes con rinde y calidad variada, y con retraso en la cosecha por desuniformidad en la madurez de los cultivos”, marcaron.

“En el sudeste de Buenos Aires, principal zona para el cultivo, la cosecha se desarrolla con rindes superiores a la media de los últimos años, muy buenos calibres y con proteína baja, que en muchos casos no alcanza el nivel requerido por los estándares malteros/cerveceros”, completaron. (Fuente La Voz del Pueblo). (30-12-23).

Los comentarios están cerrados.