Se espera que baje el precio del aceite de oliva
Con una nueva y rentable temporada de cosecha concluida hace semanas en campos de la región, una de las familias con mayor superficie destinada a la producción del olivo, sostiene que en los próximos meses el precio comenzará a bajar y se notará en las góndolas al momento de comprar aceite de oliva.
Por estos días los precios internacionales están altos, pero se espera una baja ante la gran cosecha que se avecina en España, confió Federico Hollender a La Voz del Pueblo.
El joven productor explicó que después de la gran suba de precios internacionales experimentada hace dos años, “se espera que bajen”.
Entiende que ello ocurrirá porque el país ibérico “va a tener una muy buena cosecha entre octubre y noviembre, entonces se espera que haya mucho volumen de aceite en el mundo. Los precios van a bajar, van a volver a ser normales en realidad, porque ahora están muy por arriba de la media”, sostuvo.
La familia de Federico Hollender destina 130 hectáreas a la producción del olivo; y sumó 40 más para ampliar la capacidad
En Dorrego
Hollender también contó que la producción de aceite de oliva en la zona continúa creciendo; y señaló que para la temporada 2024 la cosecha fue “similar a la anterior”, con una duración de un mes y utilizando la misma maquinaria, incorporada en los años recientes.
La superficie cosechada se mantuvo estable en 130 hectáreas y el rendimiento rondó los mil kilos de aceite por hectárea; “no dice mucho porque depende de cada plantación, de cada parcela y la variedad”, expresó el productor.
Sin embargo no dudó en afirmar que la producción seguirá en aumento ya que en la propiedad se plantarán 40 hectáreas adicionales que entrarán en producción en los próximos años.
En ésta misma línea confió que –cada año- seguirán incorporando más tierras a este tipo de producción. “Sí, la idea es seguir plantando todos los años”, dijo en alusión a la voluntad de ir ampliando la capacidad de producción de las tres especies que producen arbosana, de sabor dulce; arbequina más frutal y coratina, que tiene un sabor más potente.
“Son las que siempre tuvimos y tienen un momento de maduración distinto, por lo que cosechamos primero una, después la otra y luego la restante, por un tema estacional. Es genético de cada variedad, tienen respuesta distinta a las condiciones ambientales”, explicó.
Tecnología aplicada
Para atender todo este potencial, la familia construyó su propia almazara, la fábrica donde se procesa aceite del olivo recién extraído de las plantas.
La sección de industrialización fue utilizada por segundo año consecutivo y contribuye a absorber el crecimiento de la producción de los campos de los Hollender.
Los Hollender además pudieron en ésta cosecha utilizar por tercer año consecutivo la vendimiadora que decidieron incorporar en su momento para optimizar los tiempos de cosecha.
La cosechadora les permite estar en la vanguardia del proceso integral de producción del olivo, desde el distrito de Coronel Dorrego que es considerado –por la superficie que le destina- como la capital bonaerense del olivo.
Crece el mercado interno
Hasta el momento, Federico contó que su familia sólo ha comercializado en el mercado interno, con buena demanda tanto del sector gastronómico como minorista.
En este sentido destacó el movimiento en el puesto de venta que tienen a la vera de la ruta, con un incremento de ventas especialmente durante los fines de semana largos, y en temporada de verano.
“Hay gente de todo el país que compra porque la ruta tiene mucho tránsito, o sea mucho turista que va y viene a todos lados. Y también mucha gente que -por trabajo- viaja y lo vemos porque hablamos con los clientes, y eso es bueno”, comentó.
Entiende que ese dato surge del aumento sostenido en el consumo interno de aceite de oliva Premium, como el que producen.
Estos indicadores alentadores, que se apoyan en el crecimiento del mercado interno, respaldan la decisión familiar de continuar con los planes de seguir expandiendo la producción en los próximos años. (La Voz del Pueblo). (21-06-24).