Dichiara: «El domingo colapsó todo y algunos no cumplieron con los protocolos»
«Quedó claro que la gente va a salir de vacaciones y lo va a ser en buen número, el domingo colapsó absolutamente todo».
La frase corresponde a Alejandro Dichiara, intendente de Monte Hermoso, al completarse hoy el primer fin de semana (largo) de la temporada con protocolos por la pandemia de coronavirus.
«Esto trae aparejado que tengamos que ajustar un montón de cosas con los controles e incentivar muchísimo que vamos a estar veraneando en medio de una pandemia; hay gente que no lo entiende», admitió en diálogo con Panorama, por LU2.
En ese sentido, admitió que deberán profundizar los trabajos para controlar las fiestas clandestinas, los paradores «con exceso de gente» o «con música para bailar por más que sea al aire libre».
«Va a haber que ajustar muchas cosas y vamos a tener reuniones con los propietarios en los próximos 15 días», señaló.
«Vamos a tener que hablar muy claro de las sanciones, hay reglas que cumplir. Estamos expuestos a tener que controlar y un parador no puede tener una terraza con gente amontonada», continuó.
Además, trasladó lo observado durante el fin de semana a las estadísticas.
«Europa es el diario del lunes que tenemos que estar mirando. Tuvimos 20 casos durante ocho meses y ahora tenemos 26, de los cuales hay seis activos. Lo que pasó este fin de semana lo vamos poder evaluar en diez días aproximadamente. Indudablemente, el no cumplimiento de los protocolos aumenta la posibilidad de que haya casos. Los casos desmedidos pueden traer circulación viral y eso después es imposible de pararlo», relató.
Dichiara contó que «se vieron colas en restaurantes y rotiserías» y que «nos sorprendimos de la cantidad de gente que vino».
«A la gente no le importó ir a comer adentro, se llenó absolutamente todo. Y algunos no cumplieron con los protocolos», dijo.
«Fue un fin de semana a pleno y la gente gastó muchísimo —siguió el intendente—. La gente vino, gastó, la pasó bien y disfrutó de la playa; vino dispuesta a vacacionar».
En cuanto a los controles, Dichiara señaló que hay 30 parejas de inspectores recorriendo la playa y recordándole a la gente que debe cumplir con los protocolos mínimos de cuidado. «Hay que lograr consciencia de la gente», dijo al respecto.
Mientras que en el acceso, los controles son «bastante laxos».
«Se va a parar un auto cada diez, se pide la aplicación CuidAR o el papel con la autorización para ingresar al destino a donde va como ocurre en toda la costa atlántica argentina», completó. (La Nueva.) (8/12/20).