Cuáles son los rubros y sectores que Reyes y otros intendentes de la zona pidieron reactivar cuanto antes

Esta semana el gobernador Axel Kicillof mantuvo con gran parte de los intendentes de la provincia una serie de teleconferencias para consultarles qué actividades y sectores creen que deberían dejar atrás la etapa de cuarentena total para pasar a la siguiente, caracterizada por la reactivación paulatina de su funcionamiento y bajo estrictas medidas de seguridad sanitaria.

La prioridad -dejó en claro el mandatario- la tendrán los pedidos de los 58 distritos que hasta el momento no han registrado casos de Coronavirus. Además, les advirtió que cada solicitud se estudiará con la Nación “sin ninguna urgencia”, y que la reapertura económica será “sectorizada y transitoria, atada a la evolución de la pandemia”.

Las respuestas de muchos de los intendentes de esta zona, como se esperaba, no tardaron en llegar a su despacho. La opiniones fueron diversas, pero todas coincidieron en algo: con los protocolos de prevención adecuados, en la gran mayoría de los distritos de la región podrían reactivarse muchas actividades.

El pedido que más se repitió -según pudo saber La Nueva.- es que se autorice la “actividad controlada” de trabajadores ligados al rubro de la construcción -albañiles, plomeros, gasistas, pintores y electricistas, entre otros- y servicios de mantenimiento hogareño, como parqueros.

“Es un sector que mueve a todos los rubros, cuyos trabajadores por lo general viven al día. La mayoría, de hecho, no tiene ahorros para soportar está compleja situación económica”, explicó el intendente de Monte Hermoso, Alejandro Dichiara, uno de los jefes comunales que solicitó esta excepción.

En el balneario -según datos del municipio- hay más de 50 obras de construcción “de gran porte”, entre las que figuran edificios y complejos de cabañas.

“Lo que pidieron desde la Provincia es que les demos una idea de la población que vamos a permitir salir a la calle. Como no tenemos censados a estos sectores, ya lanzamos la inscripción en el Registro Único Municipal de Trabajadores de la Construcción y Mantenimiento”, contó.

La inscripción se realiza únicamente a través de un mail, que se debe enviar a la casilla inspeccion@montehermoso.gov.ar, según detalló el secretario de Obras Públicas, Marcos Fernández.

“Vamos a cerrar la inscripción el 20 de abril para enviarle cuanto antes los datos al gobernador. Pero cuidado: en caso de que nos aprueben este plan de flexibilización, serán habilitados para retomar sus tareas quienes estén correctamente anotados, y bajo ningún concepto vamos a dejar que vengan trabajadores que no sean del distrito”, aclaró Dichiara.

Otros jefes comunales de la zona también solicitaron la apertura de comercios u oficinas de servicios que hoy permanecen cerrados. La lista incluye desde lavaderos de autos, peluquerías y tiendas de cosmética hasta estudios contables y de abogacía, oficinas de productores de seguros e inmobiliarias.

“Hay que empezar a contemplar la situación de las actividades que en los distritos chicos como el nuestro no implican mucho movimiento de gente. Si se cumple un protocolo estricto y no se reúne mucha gente en espacios cerrados, los negocios que son atendidos por una o dos personas pueden funcionar”, opinó el jefe comunal de Puan, Facundo Castelli.

El intendente de Coronel Pringles, Lisandro Matzkin, señaló que otra alternativa que debe contemplarse es que los rubros comerciales que hoy no pueden funcionar tengan la posibilidad de abrir y realizar ventas electrónicas o telefónicas, con envío a domicilio (delivery).

Algunos incluso plantearon la posibilidad de que se permita el take-away (retiro en sucursal por parte del cliente), en forma controlada y por turnos.

“Si los comercios realizan una atención controlada, con una persona atendiendo y un administrativo, como máximo, se podría flexibilizar la cuarentena en el sector comercial. Y en el caso de los profesionales pedimos que puedan trabajar a puertas cerradas, salvo los que están ligados a la salud, con una persona por turno y sin sala de espera”, señaló el intendente de Saavedra, Gustavo Notararigo.

Carlos Bevilacqua, de Villarino, opinó que en su distrito incluso se podría flexibilizar más la atención en tiendas comerciales.

“Siendo uno de los rubros más afectados, solicitamos se las habilite a funcionar en la franja horaria de 9 a 17”, indicó.

Las medidas a exigir -propuso- serían la utilización obligatoria de tapabocas “tanto a los clientes como a los comerciantes”, el ingreso de una persona por vez a cada local y el respeto de una distancia mínima de 1,5 metros en la fila que pueda formarse en la vereda.

Bevilacqua también solicitó que vuelvan a operar las firmas privada de cobro de impuestos y servicios. Sería de 10 a 16, con los mismos requisitos que en el caso de los otros comercios.

“Y solicitamos que sea considerado esencial el servicio doméstico y el de peluquería. Este último funcionará por turnos de una sola persona, mientras que el personal doméstico deberá inscribirse en un registro especial que se creará al efecto”, propuso.

Por último, el intendente de Villarino pidió que se autorice al municipio a “afectar a la totalidad de su personal a tareas presenciales”, a los fines de “garantizar la prestación de la totalidad de los servicios que brinda el municipio a los vecinos”.

Algunas industrias también fueron incluidas en los pedidos de los jefes comunales de la zona, en especial aquellas que demandan una importante cantidad de mano de obra.

“En nuestro caso, elevamos una solicitud para que una conocida empresa de fabricación de equipos de GNC pueda comenzar a tener actividad”, indicó el intendente de Coronel Dorrego, Raúl Reyes.

Coronel Suárez ya está aplicando excepciones “administradas”

Amparado en lo que algunos consideran “grises legales” dentro del decreto 297/2020, a través del cual se dispuso el aislamiento social preventivo y obligatorio en todo el país, el municipio de Coronel Suárez está llevando adelante desde hace algunos días una “cuarentena administrada”.

“Escuchamos a los vecinos y con responsabilidad, de a poco, fuimos tomando medidas”, señaló el intendente Ricardo Moccero.

Las medidas a las que se refirió el jefe comunal se desprenden del artículo 10º del decreto 297/2020, a través del cual el presidente Alberto Fernández dispuso la cuarentena total y obligatoria a partir del 20 de marzo pasado.

En ese artículo de detalla que «las provincias, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los municipios dictarán las medidas necesarias para implementar lo dispuesto en el presente decreto, como delegados del gobierno federal», sin perjuicio de otras medidas que deban tomar «en ejercicio de sus competencias propias». Algunos intendentes -entre ellos, Moccero- interpretan que esta parte del decreto los habilita a disponer flexibilizaciones.

A partir de esto, fue emitiendo excepciones que permitieron que pudieran reanudar su trabajo psicólogos, kinesiólogos, odontólogos, nutricionistas, peluqueros, depiladoras, manicuras y podólogos, entre otros. En todos los casos, la reanudación de labores se hizo con turnos, sin sala de espera y a puertas cerradas.

También se dispuso que los comercios puedan realizar envíos a domicilio y que, los que no puedan hacerlo -los de venta de vestimenta o calzado, por ejemplo- abran sus puertas tres veces por semana y sólo durante la mañana.

Las aseguradoras e inmobiliarias, por su parte, funcionan dos días a la semana.

«El único requisito es contar con una habilitación firmada por el propio intendente y el uso de tapabocas por parte de dueños, empleados y clientes», indicó una fuente comunal.

Hasta el momento, el distrito no tienen ningún caso de COVID-19 confirmado.

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