Escándalo en Claromecó: renunció el delegado después de que el hijo de un fiscal volviera de Brasil y entrara al pueblo sin autorización

Una masiva manifestación espontánea de vecinos de Claromecó motivó esta noche que el hijo del fiscal Carlos Lemble, quien aparentemente habría ingresado sin autorización a la localidad tras retornar desde Brasil, se fuera del lugar escoltado por la policía.

   El escándalo había generado, horas antes, la renuncia del director del Organismo Descentralizado Claromecó-Servicios Turísticos (el delegado del intendente de Tres Arroyos), Carlos Ávila, quien habría querido contener el acceso 
del joven, pero sin éxito.

El conflicto se desencadenó porque el jueves pasado se dispuso el cierre preventivo del acceso a la localidad por un caso positivo de coronavirus.

   «Motiva la presente el sentimiento de haber fallado a mis principios al no poder cumplir con el compromiso asumido de defender y cuidar a mi pueblo ante esta pandemia que estamos enfrentando», dice una parte de la carta que Ávila dirigió al jefe comunal Carlos Sánchez.

Esa situación provocó la indignación de muchos vecinos autoconcovados en Claromecó, que se dirigieron en sus autos (marcha de bocinazos) y a pie hasta la vivienda donde estaba confinado el hijo de Lemble.

   Allí tuvo que presentarse la policía, para evitar que la situación pasara a mayores.

Después de varios minutos de gritos y cánticos, el joven, finalmente, se retiró del lugar a bordo de una camioneta Toyota blanca, doble cabina, escoltado por la policía.

   No fue confirmado pero trascendió que, en principio, lo llevaron hacia Tres Arroyos. (La Nueva.).

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