Pasiones, senos artificiales y algo de inteligencia

TEXTO DE GUSTAVO BLÁZQUEZ EN FACEBOOK

Pasional, enfervorizado, armas en ristre y boina blanca contra el unicato; así de pasional, así de enfervorizado y medio siglo después con los pies refrescándose en la fuente de una plaza que ni los milicos ni los de levita querían que fuera del pueblo; después los aviones fratricidas y desde lejos los poetas escupiendo tristezas, con las calles repletas de carteles peronistas como soñaba, casi plañidero, Cortázar en aquel exilio; con la 9 de julio repleta y desde el palco el rezo laico del Preámbulo de la Constitución, ganándose por entero las ganas en el retorno de la libertad escrita con tinta hemática. Pasional.

Qué pasó; qué nos desapasionó; una cuestión económica y sanseacabó. Definitivamente, no; o al menos así debería ser.

Alguna vez las tías solteras, las que habían criado hermanos como hijos, se horrorizaron ante la aparición de senos artificiales, los senos, nada más. Hoy nos alegramos que la inteligencia sea artificial. Pero tan artificial es nuestra inteligencia que si en algún momento de la historia hubo de aparecer alguien con la suficiente dosis de audacia y mesianismo sería seguido hasta el mismísimo averno, entre espesas nieblas, a los manotones, aunque sin pasión y sin inteligencia. Todo artificial. Todo. Absolutamente todo.

Será hora que la pasión resurja, que las letras salgan de las plumas abrazadas a dedos de verdad y las ideas también. También. (25-07-25).