El maíz, una vez más protagonista en la región

Por estas fechas ya hay mucha gente sembrando maíz, otros que ya lo hicieron y otros que están viendo qué pasa con la fecha, qué variedades elegir o cuáles serán los objetivos para esta campaña. Pero como sucede año tras año, el primer interrogante que siempre aparece es el clima.

En tal sentido, si tenemos que hablar de maíz en la zona, obviamente nos tenemos que dirigir hacía Coronel Dorrego, una de las principales regiones del cultivo.

“En un momento tan importante en plena siembra de maíz y, seguramente también de girasol, es fundamental que haya humedad. Este año la región más beneficiada en cuanto al factor climático fue desde Dorrego hasta Bahía Blanca. Después, cuando nos vamos acercando más hacia Tres Arroyos o hacia la costa, los regímenes de lluvias fueron menores”, indicó el ingeniero Gustavo Thiessen especialista en el cultivo.

Con respecto a la siembra de maíz, este año, además de quienes siembran con objetivos de rendimiento o incluso eligiendo el híbrido, se da una diferencia de precio muy importante en el momento de cosecha por la falta de maíz temprano que va a haber en la zona núcleo. ¿Esto también tenemos que tenerlo en cuenta por el tema de velocidad de secado o por el híbrido a elegir en el sudoeste?

-Es uno de los factores que generalmente consultan. Dentro del gran abanico de híbridos que uno encuentra, y más para los manejos de baja densidad que tenemos en el sudoeste, siempre mencionamos que dentro de la lógica hay híbridos flex doble espiga y macolladores, como así también algunos precoces.

Generalmente, una de las ventajas de los macolladores es que con pocas plantas muchas veces tenemos mejores rindes, ante un eventual año sin precipitaciones y con manejo de fertilización. Sin embargo, los dobles espigas ciclos cortos generalmente pueden ser utilizados o son demandados para tener ese maíz seguro de fines de marzo o comienzos de abril seco. Además, también nos permite entrar con una fina, y, después, generalmente va una cebada.

Esto hace que en la elección de ese tipo de híbridos tengamos que reajustar un poquito más el número de plantas. Generalmente todos los híbridos que son de secado precoz o tienen una performance más interesante con respecto a eso, necesitan o requieren tener un número más de plantas porque las estructuras son distintas y la productividad por individuo es menor que en un macollador o doble espiga.

También, dentro del grupo dobles espigas hay ciclos largos, pero la salvedad es que acá en Coronel Dorrego se han empezado a hacer siembras a fines de septiembre o comienzos de octubre y que han tenido, aún con macolladores, resultados bastante interesantes. Eso no significa que están secos de entrega, pero estamos a medio punto, lo cual generalmente no es un problema para la comercialización.

Desde el punto de vista de seguridad de cosecha, es preferible ir a ese tipo de híbridos más seguros, como puede ser un macollador o un doble espiga, aunque el ciclo sea más largo, y evaluar el secado en un año en que el maíz va a tener un buen valor en vez de repartir la superficie.

-Si es temprana no vamos a tener problema. Vamos a hacer sinceros, el problema de todos estos ciclos largos o de los macolladores empiezan cuando las siembras comienzan en noviembre porque ahí ya no lo vamos a tener seco. A lo sumo lo que se puede asumir es el costo de secado.

Volviendo al tema de elegir, acá el punto pasaría por si el productor quiere hacer algo de maíz seco o tenerlo preferentemente seco para lo que puede ser abril. Es decir, tratar de elegir los mejores lotes dentro del campo, más que nada porque en las siembras tempranas, sea con los ciclos largos o cortos, la floración va a estar cayendo entre el 15 y el 20 de diciembre.

Entonces, la floración iniciaría con el verano en su plenitud y la demanda atmosférica de humedad estaría en su pico máximo. Por ende, hay que saber regularlo en un suelo de cuarenta o cincuenta centímetros a la tosca.

A mi criterio, cuando nosotros estamos sembrando en esa fecha, la cobertura pasa a ser tan importante como la densidad. Y, después, en la selección de los híbridos, nos podemos jugar con un doble espiga o con un macollador.

Con respecto a la cobertura, si bien no es probable tener alta cobertura con baja densidad, si uno quisiera además cuidar la cobertura de suelo, ya sea por mantener el sistema directa o eventualmente en planteos mixtos ganaderos, ahí los híbridos deberían ser macolladores versus un doble espiga o es indistinto.

-La realidad es que, si quisiera regular de alguna manera en una zona un poco más compleja, trataría de buscar en sí algún material que puede llegar a ser de una sola planta. Pero volvemos a lo mismo. El tema es animarse porque a su vez lo que se observa es que ante esa condición la capacidad de aguantar la seca es interesante. Aclaro para no generar una discordia, son para ambientes de cuatro o cinco mil kilos. Ahí lo que también debemos saber es seleccionar el material. Esto lo tiro como algo que este año lo vamos a diagramar más a nivel ensayo para ver diferencias.

Creo que en su momento lo hizo la gente de Aapresid, y vimos que la diferencia en macolladores y doble espigas se marca sabiendo poner el número de plantas.

En ultra baja densidad hay que tener algún recaudo con el tema de las malezas

Así es, con estas nuevas tecnologías cuando uno empieza a tronar los cultivos de maíz, justamente lo que observa es que el maíz no genera un canopeo. Para que se entienda, es como que el verde tiene que cubrir el suelo.

Entonces, es una estructura que no cubre y, por ende, si hay luz y humedad, las malezas salen a flor de piel. Eso no ocurre en baja densidad con girasol y con soja porque ahí son distintas, ellas de alguna manera pueden llegar a canopear aún hasta con hojas de 70 centímetros. Son más caribeñas, les gusta el calor, explotan, pero son más ineficientes en el uso de milímetros.

Por eso en el caso del maíz radica mucho la importancia de la cobertura porque al no generar ese canopeo, estamos exponiendo mucho más las posibilidades de malezas. La diferencia que se puede encontrar es que en el maíz tenemos mucha más cantidad de ciertos herbicidas, hasta residuales, que nos permiten estar un poquito más libres de malezas en los períodos críticos.

Y para las malezas que generalmente son más complicadas, y que vienen arrastradas por el girasol o por la soja, en el caso del maíz tenemos muchas más herramientas de herbicidas.

En el norte tal vez tienen algún problema con ciertas gramíneas que nosotros acá todavía no, por el hecho de que rotamos mucho con fina y que también se mete la ganadería.

Entonces, si bien es un problema tenemos muchas más herramientas, por lo cual, desde el punto de vista de malezas, es mucho más manejable. Ahora, el caso de la soja y del girasol es mucho más delicado en los períodos iniciales, pero una vez que ya tiene un cierto tamaño, es como que la batalla también se puede se puede ganar.

Con respecto al profundidad de siembra, ¿hay alguna diferencia de acuerdo al tipo de híbrido?

-No, con respecto a diferencias de híbridos hay algunos trabajos que lo marcan con el anclaje por el trabajo con hormonales, ya que muchas veces influye sobre la caída.

El otro que se estudia, y que en la zona se empieza a usar cada vez más, es el pie de pato que me parece que está más relacionado con la profundidad de siembra. No he marcado diferencias de uno con otro.

En la siembra de una avena o una cebadilla, qué época sería mejor teniendo en cuenta tan baja densidad.

-A este tema lo relaciono con algo que hablamos anteriormente sobre el tipo de herbicidas que podemos llegar a estar utilizando. Se puede hacer hasta con una trasina, pero dependiendo del año. Ese sería el único factor a tener en cuenta.

Las veces que lo hemos hecho se observa que el voleo empieza a germinar cuando: opción A, viene muy bebedor, opción B, el maíz se empieza a entregar y hay un remanente de humedad superficial. Nunca he tenido o por lo menos no he observado problemas de cosecha. Hemos hecho pruebas interesantes también con maíces de segunda en lotes.

Entonces, se puede armar un combo muy interesante. Verdaderamente el cultivo de cobertura y las formas que se pueden llegar a generar para los distintos usos son más que interesante en una zona donde a mi criterio en el cultivo de verano, y principalmente maíz, la cobertura paga y mucho.

Para cerrar me quedo con una con una frase que es aplicable a la vida: “todo concepto que no evoluciona se transforma en un prejuicio”.

Es una frase de un maestro. Uno tiene que alinearse con la naturaleza, preguntarse los por qué y lo bueno es que nunca terminamos de aprender. Esto aplica para todos los cultivos, no hay que fanatizarse con una sola causa, es tomarlo como una herramienta más. (Infoduoeste). (24-12-22).

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