Esto pasaba hace 5 años – Vecino afectado por agroquímicos: “No nos van a envenenar; las leyes están para cumplirse”
Así lo informó LA DORREGO el 22 de agosto de 2014:
Luego de que un vecino denunciara en el Concejo Deliberante que sufrió algunos problemas de salud por el uso de agroquímicos en un sector prohibido, integrantes del cuerpo legislativo plantearon su preocupación por la situación descripta y anticiparon que este tema también se tendrá en cuenta para analizar el proyecto de zonificación de la ciudad cabecera en el cual se está trabajando.
A través de una nota enviada al CD, Roberto Belis recordó que alrededor de las 10 del pasado 1 de agosto, en un campo ubicado detrás del cementerio, sobre calle Gregorio Juárez, comenzaron a fumigar.
“Yo detuve a la persona que manejaba el fumigador, que es Miguel Mazzarini, y le expresé mi molestia porque realmente me sentí muy mal, con tos y vómitos, y me contestó: a mi me mandó mi patrón, que es el Señor Arribas, que por ser Ingeniero Agrónomo es doblemente responsable”, mencionó Belis.
“Los Inspectores dieron aviso inmediatamente al Señor (Eduardo) Del Valle (director de Inspección General y Seguridad), quien dio orden de sacarlo con la policía, pero en ese momento llega el dueño del campo y no fue necesario, se disculpó, retiró el fumigador, pero creo que no es suficiente una disculpa, porque no debe haber ignorado que hay una Ley que prohíbe esa práctica.
“Creo que todos saben que está prohibido en un radio de 1500 mts (en realidad, la reglamentación menciona mil metros) fumigar alrededor de la planta urbana. También se acercó el Señor Cotino Pérez que por cierto conoce muy el manejo de los agroquímicos.
“Él posee una finca aledaña al campo mencionado. Estaba muy alarmado porque decía que le iban a quemar las plantas. Por lo tanto es testigo de lo que les estoy informando. No sé que agroquímico estaban usando pero era irrespirable. Si yo soy un adulto y me sentí muy afectado, no quiero imaginar si lo aspiraron niños que hay en ese sector, también los animales y las plantas.
“Yo no pasé por casualidad por ese lugar, es frente a mi finca y no voy a permitir que vuelvan a hacerlo en otra oportunidad, voy a denunciar cuantas veces sea necesario. No nos van a envenenar, estoy muy enojado por lo ocurrido. Sea para quien sea, las leyes tienen que cumplirse y más cuando se trata de la salud. Esto es todo, ustedes saben como manejarse. Gracias por difundir esta situación tan perjudicial para nuestro pueblo”, señala, textual, la nota de Belis al Concejo.
A su turno, el presidente del bloque de Juntos por Dorrego, Hugo Segurola, admitió que so bien hay normativas que regulan el uso de agroquímicos, aún existen aspectos discutibles y vacíos legales.
“Al vecino Belis y al resto de la comunidad, les decimos que este Concejo Deliberante, a través de profesionales contratados, está trabajando en una nueva zonificación para Coronel Dorrego que también deberán contemplar estas cuestiones”, explicó.
Luego, el titular de la bancada de la UCR, Fabián Barda, dijo que los hechos narrados por Belis se ajustan a la realidad y destacó que la intervención del director de Inspección y de la policía impidió que se siguiera realizando una actividad que está prohibida en el lugar en la cual se estaba concretando, labrándose el acta correspondiente.
Barda admitió que la cuestión relacionada con agroquímicos se encuentra en una especia de stand by en el Concejo, debido a que en otros lugares de la Provincia de Buenos Aires hay parámetros diferentes, citando como ejemplo el partido de Cañuelas, donde –dijo- la aplicación de este tipo de sustancias está prohibido hasta en un radio de 2 mil metros del casco urbano.
“El gobierno provincial ha comenzado a debatir una readecuación de las leyes de acuerdo a nuevas tendencias sobre la peligrosidad que esos agroquímicos podrían traer hacia las poblaciones urbanas”, dijo.
“Es cierto que ordenanza municipal no puede ir en contra de la Ley, por el principio de la pirámide jurídica, y hoy están establecidos los mil metros, como también que la autoridad de aplicación no es el municipio, sino órganos provinciales como el caso del OPDS”, aclaró.
Luego, consideró que para evitar distintas interpretaciones, lo más conveniente sería la modificación de la Ley de Agroquímicos, no sólo en lo relacionado con la aplicación de agroquímicos, sino también en cuanto a su almacenamiento.