Ecos de la Memoria: Los signos del peronismo
Por Fabián Enzo Barda
Siempre ha sido materia de situaciones conflictivas en el desarrollo político de la hoy República Argentina la relación entre los distintos niveles de Estado. Si bien a medida que ese propia pirámide de niveles estatales fue definiendo normativamente esa relación, básicamente a través de una ley de Coparticipación Nacional y leyes de Coparticipación Provinciales en cada una de las jurisdicciones, no escapa a la realidad que la presencia de estados, como el provincial, en los municipios reconoce varios factores.
La misma pertenencia de partido gobernante, la influencia de caudillos o referentes políticos en el concierto de la política provincial y nacional han determinado la presencia de obras para el distrito en diferentes presupuestos. La matriz más resonante fue la influencia de Ignacio Justo Sánchez en el tiempo de la República Conservadora, la de Gregorio Juárez durante la autodenominada “Restauración Conservadora” y la de Ricardo Fuertes, desde 1955 en adelante, cuando se produjeron salidas electorales hasta 1971, momento de su muerte. A ellos les colgaron las insignias de hombres influyentes ya que por su estatura política lograron obras y reconocimiento del distrito en el ámbito nacional y provincial.
Ahora lo que tratamos de analizar es como se dio la presencia del primer peronismo (1946-1955), cuasi hegemónico en el país, en un distrito que los propios resultados electorales de aquellos años lo edifican como un “bastión radical”. Vale aclarar que el primer triunfo del PJ, en Dorrego, se da en las elecciones de medio término de 1989 y llegará al gobierno municipal de la mano del Dr. Pedro Juan Testani en 1991.
Luego de una etapa de intervenciones, en 1948, se llega a la normalización institucional en Coronel Dorrego. Ese año resulta electo Emilio Durañona que va a gobernar hasta 1952 cuando triunfe Guillermo Aiub. En 1955, logrará su primer triunfo electoral para el máximo cargo distrital el Dr. Nírido Santagada que, pese al Golpe de Estado de setiembre, será repuesto por la “Revolución Libertadora”.
Aun con la predominancia radical el peronismo de los primeros tiempos dejó sellos que aún se mantienen por tratarse de obras de infraestructura y vivienda y otros que quedaron en la memoria popular.
Todavía existe gente en el pueblo que habla de los Barrios de Perón para referenciar a las dos unidades de viviendas que se denominan “Barrio Obrero”. En Dorrego existe el Barrio Obrero 1 hoy rodeado por el Barrio San Martín y el Barrio Arquitectura y el Barrio Obrero 2, frente al Jardín N°901 y vecino de otro barrio de obreros como el de “Luz y Fuerza”. Se trata de construcciones típicas del primer peronismo. Tienen un particular diseño. Se construyeron barrios de casas que hallaron inspiración formal en la arquitectura de las misiones jesuitas de la costa oeste de Norteamérica. El tipo, conocido como californiano, había sido introducido en el país en las décadas del veinte y del treinta por los sectores burgueses, hallando excelente receptividad por la creciente influencia norteamericana. En el período en que los migrantes internos fueron empujados a la ciudad por los desfavorables términos de intercambio económico, el chalet californiano fue visto como símbolo de ascenso social por vastos sectores que pugnaban por incorporarse a la clase media argentina. Quien impulsó estos barrios en la provincia fue el gobernador Víctor Mercante cuyo nombre también queda asociado a la construcción de las popularizadas “Escuelas Mercante”. En el distrito de Dorrego se construyeron varias, entre ellas, la Escuela N° 19, ubicada en la hoy Avenida Casal Varela que precisamente fue uno de los referentes del primer peronismo proviniendo de la U.C.R.
El nombre del Dr. Casal Varela queda asociado a una de las obras más importantes que el peronismo provincial impulsó en los años 40 y 50.
En marzo de 1950 fue inaugurado oficialmente el Centro Materno Infantil ubicado en la intersección de las calles Dinamarca y San Martín, lugar donde actualmente funciona el Centro Educativo. “La Maternidad”, como la inmortalizó la memoria popular, fue habilitada con acto en el que participaron el entonces Ministro de Gobierno Dr. Héctor Mercante, el Intendente Municipal Emilio Durañona, el Ministro de Asuntos Agrarios Tomás Sisterna y el Dr. Carlos Casal Varela director del nuevo centro de salud. “La Maternidad” funcionó hasta la llegada de Anselmo Marini al gobierno provincial en 1963. Parte del personal fue reasignado al Hospital Municipal y el edificio pasó a manos de la comuna que tiempo después lo cedió para el funcionamiento del Centro Educativo Complementario.
La inauguración del Colegio Nacional en Coronel Dorrego, en julio de 1952, fue un paso fundamental en la historia educativa del distrito. Hasta ese momento, salvo algunas jóvenes que estudiaban en el Colegio San José, el resto que abordaba los estudios secundarios debía hacerlo en Bahía Blanca o en la Capital Federal.
A partir de la irrupción del peronismo comenzó a ponerse sobre la mesa la discusión sobre la necesidad de crear un Colegio Nacional en el distrito. Primero fue el proyecto de los diputados radicales Ricardo Balbín y Emir Mercader el presentado en la Cámara de Diputados de la Nación tomando solamente estado parlamentario de presentación y no abordado en comisión. En cambio el proyecto del diputado bahiense David Diskyn fue el que finalmente fue aprobado con media sanción en la cámara baja para lograr aprobación definitiva en el Senado.
Resonante fue la visita del gobernador Aloé durante la Intendencia de Guillermo Aiub. En mayo de 1953 fue anunciada la visita del gobernador. Circulaban en Dorrego en esa época dos publicaciones, “El Pueblo”, editado por Florencio Guzmán, cercano al radicalismo y “La Voz” que editaba, su fundador, Gregorio Cejas, con posiciones pro peronistas.
El domingo 8 de mayo, “La Voz” titulará: “¡Bienvenido! – Grandiosa será la recepción que se tributará al Exmo. Sr Gobernador”. El programa de actos que anunciaba el diario de Gregorio Cejas incluía la recepción que encabezaría el Diputado David Diskin junto a representantes de la Junta Vecinal, gremios y miembros del Partido Peronista. Desde la Escuela N° 19 hasta el mástil que, en ese entonces estaba ubicado en la intersección de las avenidas Roca y República (hoy Santagada y Fuertes) fue conducido en automóvil descubierto, recibido por autoridades y alumnos de las escuelas de la ciudad se dirigió al Monumento al General San Martín, ubicado frente a la Escuela N° 1, donde rindió homenaje al Libertador Don José de San Martín. De allí al Teatro Español (hoy Teatro Municipal) donde se realizó un acto, seguidamente se hizo la denominada “Revista Rural” consistente en la “muestra de elementos motorizados y de tracción a sangre, lo que le dará al visitante una cabal expresión del potencial agrícola de Coronel Dorrego y su partido”. La muestra se desarrolló en la Avenida República (actual Fuertes) desde el Vivero hasta la Calle 8 (hoy Martín Fierro). Luego se sirvió un almuerzo en el Vivero continuando las actividades en la Sociedad Empleados de Comercio donde Aloé dio algunas audiencias. Dejó inaugurado los mencionados Barrios Obreros. Las notas de color fueron que Áloe al pasar la denominada “Revista Rural” le pidió el caballo a uno de los jinetes y montó el ejemplar que le cedieron y realizó la recorrida por la actual Avenida Santagada continuando por Rubén Álvarez hasta la entrada al Vivero Parque (en ese entonces de jurisdicción provincial). Además debemos señalar signos de ese primer peronismo en la pronta constitución, a nivel local, de la “Fundación Eva Perón” que funcionaba en un local ubicado en la actual calle San Martín y la fundación del Club San Martín de vida muy efímera por parte de dirigentes peronistas que intentaban impulsar las mismas disciplinas que competían en los “Torneos Evita” (vale aclarar que el actual Club San Martín fue fundado en 1956 como “Club 12 de octubre” y en 1967 adopta la actual denominación). (Fuente Ecos de mi Ciudad). (18-11-23).