Carbap celebra la baja de retenciones pero apunta a Milei por el “trato al campo” y la falta de obras clave

El presidente de CARBAP, Ignacio Kovarsky, respaldó la baja de retenciones anunciada por el Gobierno de Javier Milei, aunque objetó que el agro siga recibiendo “un trato impropio de una economía moderna”.
A la par, reclamó que la Nación financie el tramo pendiente del Plan Maestro del Río Salado, advirtió que la obra está “diez años atrasada” y dijo que las recientes inundaciones muestran las consecuencias del parate, y lo mismo planteó para el tramo que corresponde a la Provincia.
En declaraciones fueron en Palabras más, palabras menos, por Radio La Cielo, el titular de CARBAP valoró la decisión del Gobierno de bajar retenciones y la definió como un paso en la dirección correcta, por “acercar el trato al campo al resto de la economía”. Kovarsky sostuvo que Argentina viene aplicando un esquema impositivo “que no usa ningún país desarrollado ni ningún país de la región, ni siquiera aquellos con gobiernos de izquierda”. “Las retenciones son un impuesto nocivo que solo mantienen economías como Rusia o Kazajistán. No tienen nada que ver con la estructura productiva argentina”, afirmó.
Al analizar el impacto interno, rechazó que la reducción implique una suba en los alimentos, contradiciendo lo que plantean algunos estudios sobre el tema. “El trigo es apenas el 12% del precio del pan. Una baja del 2% en retenciones es irrelevante. Además, al productor le pagan alrededor de $3.200 el kilo vivo de carne: todo lo demás es logística, energía y estructura de la cadena”, explicó. Para Kovarsky, la discusión sobre precios está “cargada de mitos” y se utilizó durante años “para justificar un impuesto que frenó inversión y producción”.
Reclamo por obras y cuestionamientos a la Nación
El dirigente dedicó un tramo central de la entrevista a reclamar por la falta de obras estructurales, especialmente en la provincia de Buenos Aires. “El Plan Maestro del Río Salado debía terminarse en 2015. Estamos diez años atrasados. Hoy hay una sola draga trabajando cuando debería haber cuatro o cinco”, planteó. Y fue directo: “La Nación debe financiar ya el tramo 4.2. No hacerlo significa repetir ciclos de sequía e inundaciones que dejan a los productores al límite”.
Kovarsky remarcó que CARBAP mantiene “el mismo nivel de diálogo” con el Gobierno nacional y el provincial. “El campo no tiene ideología. Acompañamos a quien haga política agropecuaria que permita producir más. Lo que no coincide con eso, lo marcamos. Y lo hacemos por igual con Provincia y con Nación”, dijo. Recordó también su experiencia personal en inundaciones para explicar la urgencia: “Cuando te entran las vacas nadando al campo, entendés que el tiempo perdido en obras se paga caro”.
Producción, consumo y un costo argentino que no afloja
El presidente de CARBAP señaló que el problema central hoy no pasa por el agro sino por el poder adquisitivo. “A la gente le cuesta comprar un kilo de carne, una pizza, un jean o una goma de bicicleta. Todo está caro. No es un fenómeno del campo: es la economía argentina”, aseguró.
Para Kovarsky, el país necesita más producción, más inversión y reglas estables: “No vamos a crecer con la misma presión impositiva de siempre ni con obras frenadas. Si Brasil, Paraguay y Uruguay pudieron desarrollarse sin retenciones, Argentina también puede hacerlo”. (Infocielo). (11.12-25).



