(CON AUDIO) En el nombre de la madre
Laura Pedersen fue quien cerró la ronda de entrevistas con mujeres invitadas al programa Ni más ni menos, a raíz de la celebración del Día de la mujer.
Dentro del cúmulo de temas que por estos tiempos están instalados y de las que dio su opinión, la referencia fue “su casa”, donde mamá Kitty y su papá Jorge, cada uno en su rol, la marcaron para siempre.
Laura, que comparte tareas con su hermano Coky y son los propietarios de la rotisería Albores, sostuvo que su madre era el alma de la casa y lamenta que esa presencia femenina al frente del hogar, en muchos casos y por estos tiempos se haya perdido.
A Laura le corresponden las generales de la ley y si bien, por su trabajo, pasa muchas horas fuera de casa, hay cosas que se niega a perder. Contó que ahora con sus hijos de 15 y 3 años mantiene, fomenta y cultiva el encantador momento de la sobremesa, que sigue disfrutando como cuando era chica.
También contó que muchas clientas le han confesado que sus hijos le comentan a las madres de sus amigos cuando van a comer a otra casa: “cocinás igual que mamá”, en referencia a las comidas de Albores.
Si bien adhiere a la lucha por la igualdad de la mujer y no reniega que las parejas compartan las tareas domésticas o de crianza de los hijos, que a su criterio es una manera de mimar al otro, eso no quiere decir que se pierda aquello que ella vivió y valora.
En su relato dijo que haber estudiado terapista ocupacional le mostró una realidad que por entonces ignoraba y el compartir los problemas de otros le permitió un crecimiento como persona.
La música no podía estar ausente en la charla, porque su papá lo era y les transmitió una máxima que a su vez era una preocupación para Jorge: “que un hijo suyo no afinara”.
También dijo que vivió en una casa donde las mudanzas fueron muchas porque, según confesó «mi papá fue muy gitano”.
Inexorablemente, la charla siempre volvía a un eje central, que fue la figura y el recuerdo de su madre y esta frase sintetiza en parte el sentimiento de Laura: “El mejor momento en mi casa era cuando mi mamá cocinaba y ese olor a comida lo tengo impregnado, ahora Coqui lo puso lindo, pero mamá cocinaba mejor”. (César Mc Coubrey).