Economía y salud: ¿Cuáles son los peligros de desatender a nuestros animales?
La coyuntura económica actual puede conducir a que las personas decidan recortar sus gastos mensuales por el lado de las mascotas y sus cuidados veterinarios, desconociendo el enorme riesgo sanitario que eso conlleva.
Pese a comprender el contexto económico atravesado, el enorme caudal de información disponible sobre enfermedades de origen animal resaltan la latente posibilidad de nuevas enfermedades pandémicas de origen zoonótico.
Desde el Colegio de Veterinarios de la Provincia de Buenos Aires se alerta a la población sobre el riesgo que conlleva prescindir de los cuidados veterinarios requeridos por nuestros animales de compañía como de producción, principalmente el calendario de vacunación, y control sanitario habitual.
En referencia a esto último, el titular del CVPBA Osvaldo Rinaldi afirmó que “enfermedades como la rabia y la triquinosis son de origen animal y, por ende, son controlables; para eso necesitamos que no se descuide la atención sanitaria de animales de ningún tipo”.
“Se ha demostrado que el 70% de las enfermedades emergentes tienen origen animal y el 65% de las infecciosas que aquejan a la población humana, hoy, son zoonóticas”, amplió Rinaldi.
¿Entonces, qué hacer o cómo organizar la economía con el menor impacto sanitario posible? Cada propietario deberá analizar las alternativas, pero de ninguna forma debemos dejar de mantener los cuidados de veterinarios, ni resignar el calendario de vacunación, ya que esto traería aparejados a mediano y largo plazo consecuencias sanitarias para toda la comunidad.
¿Qué pasa con los animales destinados a la producción?
Si bien las principales advertencias giran en torno a animales domésticos, no se debe pasar por alto la importancia de la inocuidad alimentaria y, por ende, del control de todos aquellos animales destinados a integrar la cadena productiva.
Sobre esto, el Presidente del CVPBA remarcó: “Cumplir con los calendarios de vacunación de un animal destinado a la producción es igual o más importante que un animal doméstico, por tratarse de alimento cotidiano y porque el nivel de contagiosidad de esas enfermedades suele ser más elevado”. También las consecuencias económicas de un rodeo sin cuidados sanitarios adecuados sin duda traerán mayores gastos para poder revertir luego la situación. (04-08-22).