«Hay pacientes más jóvenes con cuadros más graves»
Las autoridades de los hospitales de Bahía sw Bahía Blanca que contaron la situación de sus instituciones en esta segunda ola de contagios coincidieron en que se observa una baja en la edad de internación.
El director del Penna, Gabriel Peluffo, señaló que están atendiendo «personas más jóvenes y con mayor gravedad de las que se vieron en la primera parte», aunque todavía no puede decir que haya una clara tendencia de baja en la edad de los internados.
Indicó que hasta el momento no han recibido pacientes pediátricos con COVID-19 grave y que «la complicación fundamental en internación sigue siendo la insuficiencia respiratoria aguda con fallo multiorgánico, sobre todo falla renal».
Respecto a los pacientes pediátricos, la jefa del departamento de Especialidades Pediátricas del Hospital Municipal, Silvia Zárate, contó la semana pasada que en la unidad respiratoria de ese centro médico vienen registrando un aumento de consultas y de positividad en los hisopados (3 % en febrero y 12 % en marzo), aunque la cantidad que requiere internación es «sumamente baja».
Por su parte, el titular de la Asociación Médica, Carlos Deguer, sostuvo que «el blanco en este momento es entre los 40 y 60 años, cuando antes era en los mayores de 60».
El director del Privado del Sur, Oscar Arias, contó que en este centro médico también bajó la edad de internación y que son cuadros moderados con requerimiento de oxígeno o neumonías graves que necesitan ventilación mecánica: «De los pacientes internados la mitad tienen entre 30 y 59 años y la otra mitad son mayores de 60», detalló.
En tanto, el presidente del Italiano, Francisco Nardelli, contó que ven casos de gente más joven y que «muchos son diagnosticados en ambulatorio y se aíslan en sus casas» porque no requieren internación.
En el caso del Hospital de la Asociación Médica (HAM) —como en el Español— un gran porcentaje de pacientes son de PAMI, por lo que se atiende principalmente a mayores de 60. De todas formas, su directora María Elena Sánchez Bejarano también notó una baja en la edad de internación: «Ahora tenemos un grupo entre 60 y 70 años (y un paciente de 50) y el año pasado teníamos muchos mayores de 80».
«No queremos perder libertades, pero tenemos obligaciones»
La doctora del Municipal, Graciela González Prieto, pidió que la gente adopte «con la conciencia que se necesita» los cuidados que se vienen reiterando desde el año pasado para hacer frente a este crítico momento sanitario y económico.
«La pandemia es algo de lo que no estamos libres y va a pasar mucho tiempo, probablemente un año, para estar un poquito mejor; por eso el cuidado individual implica una ayuda para todo el mundo. Si cada uno desde su lugar cumple con los cuidados y entiende por qué no hay que hacer reuniones en este momento tan difícil, pone de su parte para que todos estemos un poquito mejor», dijo la profesional.
La doctora reconoció que «nadie quiere perder libertades, pero tenemos obligaciones; nuestros derechos también implican deberes y el deber de cuidarnos es por el bien de todos».
En ese sentido, advirtió que «tenemos muchas cosas en juego, no solo la salud; está la economía de las familias, los negocios que tienen que seguir trabajando. Es importante que la gente entienda que las libertades implican la obligación del cuidado personal. La gente no se contagia en los trabajos ni en las escuelas, se contagia en lugares de reuniones sociales y familiares; por eso pedimos que se tome conciencia».
El titular de la Asociación Médica, Carlos Deguer, manifestó que toda la sociedad sabe «qué es lo que podemos hacer para cuidarnos y que no se haga es bastante frustrante».
«El uso del tapaboca, el distanciamiento, el reunirnos en lugares aireados es lo mejor para evitar el contagio y no se está haciendo, pareciera que hay una sensación de pospandemia que uno no alcanza a entender. El mundo está de alguna manera afectado por esta pandemia, el punto no es solo aceptarlo sino también darse cuenta de que la situación es grave y tenemos que cuidarnos. Depende de cada uno más allá de las restricciones que ponga el Estado», sostuvo.
El subdirector del Hospital Dr. Raúl Matera, Pablo Casella, coincidió en que «la gente se está comportando como si la pandemia no existiera, con lo cual hay una circulación prácticamente normal que está ligada al aumento de casos».
Por eso, señaló que ve necesarias las medidas restrictivas y pidió «fortalecer los cuidados personales y evitar sobre todo las reuniones sociales y las fiestas, porque creo que eso ayudaría mucho. La gente está agotada, pero el sistema de salud también».
Por último, el director del Privado del Sur, Oscar Arias, consideró que «deberíamos estar mejor preparados luego de un año de trabajo constante, de haber adquirido cierta experiencia en el manejo de esta afección, de haber hecho modificaciones hospitalarias para un virus de transmisión netamente aérea y de haber cursado una parte importante del personal la enfermedad y tener a estas alturas más del 70 % global del recurso humano vacunado, sin embargo asistimos al relajamiento de las medidas básicas de prevención por una parte amplia de la sociedad». (La Nueva.). (09-04-21).