«El virus no es joda»: Andy, Gustavo López, Baby Etchecopar y el crudo relato en primera persona
Luego de contraer coronavirus en julio, Andy Kusnetzoff permaneció una semana internado con neumonía, a la que sumó dos semanas más de aislamiento voluntario. A principios de agosto, volvió a su programa de radio, Perros de la Calle. Y el sábado, ya totalmente recuperado, volvió a ponerse al frente de PH, Podemos Hablar.
Allí tuvo como invitados a Carolina «Pampita» Ardohain, Fede Bal, Lizy Tagliani y Karina Jelinek, y se refirió al duro momento de salud por el que atravesó.
«Quiero agradecerles por los miles de mensajes buena onda y a los médicos que me ayudaron. Aprovecho para saludar al personal de salud, que está en una situación complicada. Estamos al límite: esperaba que en septiembre estuviéramos mejor. Así que gracias a todos por cuidarse. Tenía ganas de volver y de compartir el programa con ustedes. Me siento bien», expresó Andy.
«El virus no es joda. Uno me decía ‘no pasa nada’, y yo le dije ‘mirá, estás hablando conmigo, que estuve internado, con fiebre y neumonía, no es que no pasa nada’», agregó. «Dentro de todo la saqué barata».
«La pasé muy mal»
El periodista Gustavo López también reapareció en su programa de radio en una charla al aire con su compañero Marcelo Palacios para relatar su experiencia luego de ser dado de alta.
«La verdad es que la pasé muy mal», se sinceró. «La primera semana la pasé bastante bien, de hecho hicimos los programas con normalidad. El sábado 22 me levanté bien, sin inconvenientes, me bañé, me fui al balcón a la mañana e hice un video para contar lo que me estaba pasando».
Sin embargo, ese mismo día su estado se agravó con mucha fiebre y tuvo que ser ingresado a la clínica Olivos, donde pasó ocho días internado.
«El virus empezó a trabajar en mi cuerpo y me afectó los pulmones. Un día tenía el 25 por ciento, el otro el 30, el 35, otro día el 40 y se me complicó», relató Gustavo. «Es una enfermedad durísima porque estás solo, nadie te puede acariciar, nadie te agarra la mano, nadie te viene a visitar».
Eventualmente, el periodista tuvo que ser tratado con plasma, para lo cual tuvo que firmar un documento de consentimiento. «Me dijeron que había un 80 por ciento de chances de que me diera bien, pero hay otro 20 que te puede dar mal. Bueno, lo leí y me entregué», explicó.
«Al día siguiente la pasé peor todavía, tenía más fiebre que antes. Y ahí pensé realmente que no lo podía superar», agregó. Llamé a mi esposa con un mensaje absolutamente negativo y ella me levantó. Me dijo: ‘Estás loco, levantate, de ahí vas a salir’. Y a partir de ese momento es como que empecé a ver las cosas distintas. Toda la angustia que tenía adentro la empecé a sacar. Empecé a escuchar música, me hizo muy bien eso. Empecé a cantar para sacarme lo que tenía adentro, fue como una terapia».
Luego los médicos le explicaron que el plasma puede demorar hasta 48 horas en hacer efecto. Y efectivamente, poco a poco Gustavo comenzó a sentirse mejor. El lunes 31 de agosto, dejó la clínica y regresó a su casa, donde continúa con su recuperación.
«Quiero que mi relato sirva para que la gente se cuide. Porque no es joda», advirtió. «Yo veía el video de Chapelco, la gente diciendo que el coronavirus no existe, y es como grabarse a 200 kilómetros por hora por la General Paz. Son idiotas, no se dan cuenta lo que hacen».
«No jodan»
Baby Etchecopar, también afectado por el virus, grabó un mensaje que su compañero radial Javier Díaz difundió al aire. Allí, señaló que volverá a su trabajo el lunes.
«Ya estoy de alta. No jodan. Uno se cree que es joda, pero llega un momento en que te dicen ‘positivo’ y se te llena el traste de preguntas», expresó. «Nosotros la sacamos barata, pero se podría haber complicado», agregó en referencia a su pareja, Silvia Cupeiro, también infectada.
«Estamos muy bien y la pasamos muy bien, pero el único mensaje que puedo dar es que hay que cuidarse porque el virus está en todos lados y a cualquiera nos puede pasar. No hay vacuna y no somos inmunes», concluyó. (Big Bang News).3