La mayoría de los presos no tenía trabajo ni estudios secundarios al ser detenidos
El Ministerio de Justicia de la Nación presentó esta semana ayer los datos correspondientes a 2016 sobre la situación del Servicio Penitenciario, que surgen del Sistema Nacional de Estadística sobre Ejecución de la Pena (SNEEP).
En el informe se revela que la mayor cantidad de detenidos en todo el país tiene entre 25 y 34 años, aún no fue condenado, no había terminado la secundaria al ingresar a prisión y en ese momento, se encontraba desocupado o tenía un empleo parcial.
El estudio, realizado en las 290 cárceles federales y provinciales, señala también que en 2016 se registró la mayor tasa de de población penitenciaria en Argentina de los últimos 15 años (175 cada 100.000 habitantes). Este dato ubica a la Argentina en el sexto puesto en Sudamérica, mientras que en primer lugar se encuentra Brasil.
De acuerdo con el estudio, en su mayoría, los internos tienen entre 25 y 34 años (39%), seguidos por la franja de entre 35 y 44 años (23%) y de entre 21 y 24 años (17%), tendencia que no varió en los últimos años.
Además, en lo que respecta al nivel educativo, sólo el 34% tenía completa la escuela primaria al momento de ingresar al sistema carcelario, seguido de un 29% con nivel secundario completo y un 21% con secundario incompleto.
Otro dato de la estadística es que el 50% de los internos no tenía ni oficio ni profesión al momento de ingresar a prisión, seguidos por un 39% que contaba con un oficio y un 11% que tenía una profesión.
Del estudio, también surgió que el 59% de las mujeres y el 52% de los hombres detenidos lo están sin condena, aunque el porcentaje es el más bajo desde el censo carcelario de 1953.
Hay más detenidos por droga que por homicidio
Por otra parte, los datos que se desprenden de las estadísticas indican que, por primera vez en 15 años, la cantidad de detenidos por drogas en las cárceles de todo el país es superior a la de presos por homicidios.
La cifra indica que a diciembre de 2016 eran 10.476 los reclusos acusados por algún delito vinculado con las drogas, en tanto que el número de detenidos por homicidios dolosos ascendía a 10.355.