¿La Libertad Avanza presidirá el Concejo Deliberante?

Por Fabián Enzo Barda
El triunfo electoral de la Libertad Avanza el domingo último en el distrito de Coronel Dorrego, más allá de las lecturas políticas que cada una de las fuerzas participantes de los comicios haga del desempeño electoral, genera consecuencias de corto, mediano y largo plazo. Sobre todo, en un panorama electoral en retrospectiva y, por el momento, también en perspectiva, cuya volatilidad es un signo de sus características, en el marco de la emergencia y llegada al poder en el mundo de posiciones de nueva derecha en sus variantes libertarias, populistas, extremas derechas 2.0, neorreaccionarias y “alt-right”. Un amplio universo en el que los grandes trazos son coincidentes.
En Argentina, la historia de las elecciones de medio término, como fue la del domingo, ha tenido variabilidad en triunfos contundentes de fuerzas que no ocupaban el gobierno y de emergentes políticos. En el distrito de Coronel Dorrego, desde 1983 en adelante, se recuerda el triunfo del peronismo en la elección para concejales y consejeros escolares en 1989 y la aplastante victoria de Osvaldo Crego en 1993, a dos años del inicio del mandato de Pedro Juan Testani, primer y único intendente peronista de la historia de Dorrego.
El triunfo del joven Tomás del Valle el domingo último se inscribe en esa senda, ya que desde 1995 en adelante, los oficialismos locales no perdieron elecciones de medio término y solo en 1991 y 1999 hubo cambio de signo político en el cargo de intendente.
El Concejo Deliberante es uno de los poderes del Estado municipal de fundamental importancia porque permite una representación plural en la medida de la legitimidad de las fuerzas políticas locales que participan del acto eleccionario. En el plano electoral, tienen una normativa muy clara sin mayores reformas desde el retorno de la democracia en la década de 1980. También tienen tradiciones que se han respetado, al menos en el distrito de Coronel Dorrego, de manera histórica.
Es casi un axioma de la política local que quien gana las elecciones de renovación parcial del Honorable Concejo Deliberante termina presidiéndolo. Así, el Dr. Pedro Testani presidió el órgano colegiado en los últimos años de la primera intendencia de Osvaldo Crego, y este presidió por algún tiempo durante el primer mandato del “alcalde” peronista.
El capítulo VI de la Ley Orgánica de las Municipalidades, en los siete artículos que lo conforman, establece cómo se constituye el Concejo. El artículo 21, que fue modificado por la Ley 13.000, establece textualmente: “que, habiendo paridad de votos para la designación de autoridades del Concejo, prevalecerán los candidatos propuestos por el Partido o Alianza Política que hubiera obtenido mayoría de votos en la última elección municipal; y en igualdad de estos, se decidirá a favor de la mayor edad”.
Es claro que no establece taxativamente que la fuerza ganadora de la elección tenga que presidir, pero, como apuntamos más arriba, históricamente en Dorrego se respetaron los resultados logrados en las urnas. Es más, en 1994, durante la reelección de Testani, pasó a presidir el Concejo Deliberante el concejal oriundo de Oriente, Pastorino, quien terminó enfrentado con su propio intendente. En esa composición del Concejo, la Unión Cívica Radical mantenía la primera minoría debido al contundente triunfo que había logrado Crego en las elecciones parciales de 1993. Pese a ello, el Partido Justicialista presidió el HCD. (11-09-25).
Entiendo que es un despropósito que un Concejal que no tiene experiencia alguna en el funcionamiento del Concejo Deliberante de repente se convierta en Presidente del Cuerpo.- Es mi humilde opinión. Gracias