Seguridad

Abigeato: tras allanamiento en Oriente, hay pistas que conducen a una presunta colaboración policial

Foto: La Voz del Pueblo

La Justicia de Bahía Blanca que trabaja en casos de abigeato cometidos en el distrito de Tres Arroyos, investiga la existencia de una conexión policial con al menos uno de los cuatro imputados en una causa iniciada a principios de octubre.

Según la información publicada por el diario La La Voz del Pueblo, la investigación ya tiene dos detenidos con prisión preventiva en el penal de Villa Floresta acusados de “abigeato agravado”, además de un empresario supermercadista tresarroyense y un camionero acusados del mismo delito, pero sin los agravantes que motivarían su encarcelamiento.

De acuerdo a esta publicación, «la sospecha de que los ladrones que supuestamente proveían de carne robada al empresario investigado estaban conectados con la policía, surgió luego de la realización de un allanamiento practicado en la localidad de Oriente a fines de noviembre, donde esperaban encontrar al sospechoso en su domicilio, pero luego de la realización de pericias, se determinó que habían recibido un llamado telefónico donde le advirtieron que lo iban a buscar».

El pasado lunes 26 de noviembre, funcionarios del Equipo de Investigación de Delitos Rurales que funciona en la órbita de la U.F.I.J nro 20 de Bahía Blanca, a cargo del doctor De Lucia, conjuntamente con personal del Departamento de Casos Especiales de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, efectuaron un allanamiento en el domicilio de José Oscar Bertone, quien según fuentes citadas por La Voz del Pueblo, estaría sospechado de encubrimiento.

En ese sentido, de las constancias que existen en la causa, surge que el vecino de la localidad de Oriente previo obtener información policial de la diligencia que se llevaría a cabo el día 8 de octubre del corriente, habría informado de ello al imputado Jonathan Lema, quien logró así sortear la medida de coerción que se llevaría a cabo sobre su persona.

No obstante, actualmente se encuentra alojado en Villa Floresta con prisión preventiva en el marco de la causa que se sigue por la sustracción de hacienda a Ponciano Muñiz y, tal como le confió un investigador a este diario, “no se descartan nuevas diligencias como así tampoco la posible participación de funcionarios policiales”.

La ruta de la carne

Siempre de acuerdo a lo informado por el matutino tresarroyense, el pasado 22 de septiembre, una comisión del CPR tresarroyense interceptó un camión conducido por Julio César Pissoni en el que transportaban 23 animales sin la respectiva documentación.

En esas circunstancias, y mientras se trataba de determinar la procedencia de los vacunos, se constató que habían sido sustraídos de un campo en la localidad de Oriente, propiedad de Ponciano Muñiz. Para sacarlos del campo, se estima que acercaron el camión de Pissoni al corral del ganado valiéndose de un campo vecino.

Aprehendido, Pissoni brindó la información necesaria para que el equipo de Delitos Rurales avance sobre los presuntos responsables de la sustracción. Así, el 8 de octubre fue aprehendido Juan Carlos Castro durante un allanamiento en Oriente.

Esa fecha, fue la misma en la que se sospecha que se informó a Lema, el otro sospechoso, que la policía venía por él. No obstante, posteriormente se entregó en la Fiscalía y, al igual que Castro, ambos se encuentran detenidos con prisión preventiva en el penal de Villa Floresta aguardando el juicio oral.

En el marco de esta misma investigación, se imputó al empresario supermercadista tresarroyense, Jorge Mugnaga, quien terminó siendo el cuarto sospechoso en esta pesquisa. Tal como se informó oportunamente, el empresario está sospechado de adquirir los animales y procesarlos para su comercialización.

De acuerdo a lo indicado a ese diario por fuentes cercanas a la pesquisa, no fue casualidad que en el último procedimiento llevado a cabo en el domicilio de Bertone, precisamente un local donde funciona una empresa de transporte, la policía utilizada para instruir el procedimiento fue personal de la División de Casos Especiales.

Su objetivo era secuestrar elementos que permitan probar que Lema fue advertido que iba a ser detenido.

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