Cristian Martínez, dueño del gimnasio Tercer Tiempo: «El panorama es complicado»
El panorama a general de los gimnasios de la zona, tomando como referencia a algunos distritos, como Coronel Pringles, Adolfo Alsina, Coronel Dorrego y Saavedra, es muy complicado. Están con las persianas bajas desde que comenzó la cuarentena y sin novedades respecto a algún tipo de flexibilización.
De los consultados por el diario La Nueva. solo en algunos casos quienes los llevan adelante se adaptaron a herramientas virtuales y pudieron alquilar sus equipos –desde mancuernas hasta bicicletas fijas- pero están subsistiendo.
Otros, directamente, se solventan realizando otras actividades que nada tienen que ver con el rubro, cobrando los haberes de otros empleos o por la entrada que tienen sus parejas.
En el caso del profesor de Educación Física y rugbier Cristian Martínez, dueño del gimnasio Tercer Tiempo, de nuestra ciudad, este espacio era su principal fuente de ingreso y lo tiene cerrado desde el 16 de marzo, cuando se aisló de forma inmediata.
“Algunos alumnos, no todos, me ofrecieron seguir pagando la cuota pero como no estaba dando el servicio desistí, no me parecía ético”, comentó.
Pese a sus esfuerzos por continuar el vínculo a través de un grupo de Whatsapp, la iniciativa no se sostuvo.
“Alquilé mancuernas y algunas bicicletas fijas y demás equipo, como para ir subsistiendo”, contó.
Sin embargo, la entrada no representa ni un tercio de sus ingresos pre COVID-19 y no le alcanza ni para los gastos fijos.
Algo a favor: no tiene empleados, no paga alquiler y pudo conservar sus ingresos como profesor de escuela y al frente de clases de rugby (desde el año 1996) en el marco de una asistencia municipal.
“Hay otro gimnasio de musculación que paga alquiler y por lo que sé tampoco la está pasando bien y también hay espacios de entrenamiento funcional que intentaban alquilar equipos para subsistir. Estamos sufriendo y el panorama es complicado”, dijo.
FUENTE: LA NUEVA.