Por mayoría, el Concejo desestimó la incorporación de 2 trabajadoras sociales a Desarrollo Social
El bloque de UCR Cambiemos rechazó un proyecto del Frente para la Victoria Unidad Ciudadana a través del cual pretendía que el Departamento Ejecutivo evaluara la «importante necesidad de incorporar al área de Desarrollo Social, para el ejercicio económico 2020, de dos trabajadoras sociales».
La frustrada iniciativa se fundamentó en «la importante función que adquiere el rol del/ la trabajadora social en épocas de crisis, en la que emergen en distintos grupos vulnerabilizados: necesidades básicas insatisfechas, familias disfuncionales, violencia, vulneración de Derechos del niño, personas mayores en situación de descuido, entre otros».
«El trabajo social es un campo de estudio y acción vinculado con varias tareas y ramas de las ciencias sociales, las humanidades y la intervención comunitaria. Por lo mismo, es un área que opera alrededor de conceptos como la justicia social, los derechos humanos, la diversidad, el respeto y la equidad», destacaron los ediles de la oposición.
Para la oposición, la función específica de todo/a trabajador/ra social implica anticipar las posibles causas de conflictos tanto individuales como colectivos.
«Esto puede realizarse a través de proyectos de intervención que permitan conocer el contexto poblacional y las situaciones de riesgo social que se presentan, así como las carencias y necesidades del mismo contexto. En este sentido, brindar la atención directa tiene como meta potenciar las capacidades individuales para que sean las mismas personas quienes afronten y den respuesta a los conflictos sociales cotidianos», agrega el texto del proyecto.
Para el FPV – UC, «toda intervención es necesario elaborar un plan de acción que tenga objetivos concretos y haga explícito el proceso de análisis, así como las posibilidades de acompañamiento y evaluación, sea a partir del diseño de las intervenciones y proyectos como de programas y organización de servicios sociales».
«La prioridad en una comunidad es llevar a cabo las acciones necesarias para restablecer o conservar la autodeterminación y funcionamiento tanto individual como colectivo. Esto puede ser mediante el diseño e implementación de políticas sociales que reajusten el acceso a los distintos servicios», se menciona.
«En este complejo proceso intervienen, por lo tanto, dos elementos esenciales: la participación de la población misma en los esfuerzos para mejorar su nivel de vida, dependiendo todo lo posible de su propia iniciativa; y el suministro de servicios técnicos y de otro carácter en formas que estimulen la iniciativa, el esfuerzo propio y la ayuda mutua, y aumenten su eficacia. El desarrollo de la comunidad encuentra su expresión en programas encaminados a lograr una variedad de mejoras concretas.
«Siendo profesionales, hay una clara decisión de todo trabajador social en autodefinirse en su función principal “de ayudar a mejorar la vida de las personas, dado que el trabajo social es una disciplina centrada en la atención del otro.
«Sin embargo en nuestro partido, el rol que cumplen las trabajadoras sociales se encuadra, muchas veces, en lo meramente administrativo de las distintas áreas del municipio, determinado básicamente por la diversidad de situaciones conflictivas que abarca su tarea: salud, desarrollo social, educación, servicio local, entre otras».
«A partir de nuevos proyectos a abordarse desde el área de Desarrollo Social como la implementación del Programa NIDO y atendiendo a la diversidad de problemáticas sociales emergentes en momentos de profunda crisis económica, es esperable la recuperación del rol del trabajador social en proyectos de promoción, planificación, investigación, evaluación, supervisión, entre otros, sin dejar de lado la atención directa a los vecinos».
Las explicaciones con las posturas de ambas bancadas fueron dadas por Griselda Rodríguez (FPV – UC) -foto- y por Priscila Minnaard (UCR – Cambiemos). El audio con parte del debate, podrán escucharlo en la parte superior de este post.
