Historias Dorregueras: Pío Pío / Escribe Fabián Enzo Barda

Roger Soca fue un hombre de fútbol; es más, fue una figura fundamental en la historia de la era futbolística inaugurada en marzo de 1962, cuando se fundó la Liga Dorreguense.
Fue jugador, ocasional periodista deportivo y director técnico. En esta última faceta dejó una huella imborrable, inolvidable.
En Dorrego siempre existieron lugares donde se hablaba de fútbol: la peluquería de Rubio, la zapatería del “Pata” Suárez, la del “Petiso” Llafuré, pero sobre todo la de Nelson Di Marco. Allí solía ir Roger, a ese “sitio sagrado” donde se hablaba de fútbol en general, y de Ferroviario en particular.
Su larga y exitosa carrera como director técnico terminó eclipsando su también extenso recorrido como futbolista, en las tres etapas en las que Ferroviario compitió desde mediados de los años 50 del siglo pasado: la Liga Libre del distrito de Coronel Dorrego, los torneos de la Liga Tresarroyense y, desde 1962, la Liga Dorreguense de Fútbol de manera exclusiva.
Como se suele decir, calzarse el buzo de DT fue algo natural.
Sabio, conocedor, astuto y, fundamentalmente, ganador, era de aquellos entrenadores que contagiaban optimismo y se constituían en grandes motivadores. No importaba la edad, el lugar ni los logros. No importaba si sus dirigidos tenían catorce o más de treinta años, porque cuando te decía “Pío… Pío”, te estaba poniendo en la más alta consideración futbolística. Te estaba dando el lugar que merecías, porque al haberte elegido, hacía de cada jugador una mejor versión de sí mismo.
Tuvo aciertos memorables, como cuando, antes de cumplir los quince, puso a Ricardo Aguirre en Primera. El propio “Zurdo” recuerda:
“El primer partido que jugué en Primera fue en Indio Rico, un amistoso. Yo había jugado en Reserva y Roger Soca me llamó para decirme: ‘Pío, Pío, ahora va a estar suplente en Primera’.”
“Me acuerdo que habló con Ricardo Pucci y le dijo: ‘Vení acá Ricardito…’ —‘¿Qué pasa, Profesor?’— le dijo Ricardo.
‘Ahora, cuando entre este, te vas a cansar de hacer goles’.
Con Ricardo jugamos muchos años. Fue uno de los mejores cabeceadores de la Liga. Vos llegabas a la raya, tirabas el centro y sabías que Ricardo estaba.”
Así fue. Ese formidable delantero, sin tanta prensa, verdaderamente se cansó de hacer goles en esa delantera que, primero, completó como puntero derecho Marcelo “Pollo” Franco, y luego Viale.
Fue, precisamente, Ferroviario su cuna futbolística. Integró varias de las formaciones desde fines de la década de 1950 en la Liga Libre; desde 1959 hasta 1961, el plantel de Tercera en la Liga Tresarroyense (la popular “Colombia Chica”); y desde 1962 hasta principios de los años 70, en la definitiva Liga Dorreguense de Fútbol.
En esas distintas épocas compartió plantel con “Tito” Legagnoa, Manuel Basilio “Cordobés” Rosales, “Pochocho” Di Croce, Néstor “Marica” Fernández, Ramón Eduardo “Peto” Boumtempo, Reynaldo “Borlinga” Castiglioni, “Carlitos” Yezzi, “Yuyo” Regazzoli, entre otros.
Ya retirado de la práctica activa, a los pocos años de “colgar los botines” se calzó el buzo de entrenador y dejó un legado.
Logró el Torneo Preparación de 1979, dirigiendo a jugadores de la talla de Adolfo Croci, Néstor Fernández, José Banegas, Daniel Balbuena, “Pepe” Arenas, Carlos Capella, Ricardo Pucci, “Poty” Vallejos, Marcelo Franco, Néstor Leonardi, Roberto Remón, Modesto Mansilla, Ricardo Aguirre y Héctor Ahargo.
Previamente a ese logro, tuvo su paso como periodista deportivo en el decano de los programas de la especialidad: Aquí Deporte, dirigido por Luis Fernández. En la vieja L.U. 26, junto a Luis, Héctor Mario Balda, Ramón Buomtempo, entre otros, durante algún tiempo analizó partidos de fútbol.
Indudablemente, estar cerca de la línea de cal podía más que la magia de la radio.
Dirigió al seleccionado dorreguense en su participación en el Torneo Argentino de Interligas en 1984.
En Ferroviario tuvo varias etapas. Volvió a ganar el Torneo Preparación en 1997 y 1998. En esos planteles estaban Joel Jara, Daniel Faur, Gastón Orellano, Alberto Aguirre, Ariel Ferro, Marcelo Fernández, Javier Leonardo, Daniel Luis, Iván Codagnone, Sergio Acevedo, Ariel Barbarín, Ariel Massa, Fernando López, Eduardo Dables, Matías Palacios, Alejandro Papasidero, Juan García, Gustavo Colares, Martín Vega, Leonel Díaz, Ariel Tejada, Néstor Carrera, Gerardo Fernández, entre otros.
Pasó por San Martín, al que dirigió. Pero sin dudas reafirmó su valía como entrenador cuando recorrió algunos kilómetros hasta llegar a El Perdido. Allí, en Progreso —el decano de los clubes del distrito de Coronel Dorrego— se calzó el mismo buzo que lucieran Amadeo Moreno, quien le dio identidad futbolística al club, y Florencio Fernández, el último técnico ganador antes de Roger.
Entró fuerte en la historia de Progreso de El Perdido cuando, en el año 2000, comenzó a edificar el segundo bicampeonato del “verdinegro”.
Fue el año en que Daniel Luis comenzó a perfilarse como el goleador histórico de nuestro fútbol, llegando a marcar cinco goles en un partido frente a San Martín, teniendo como compinche de ataque a Alan Valcarcel.
La primera rueda la ganó Independiente y la segunda, los muchachos de Roger Soca.
El torneo se definió el 19 de noviembre de 2000, en la cancha de Progreso, en tiempo suplementario.
Por el local jugaron: Jara, J. García, Fahur, Chávez, A. Iriarte, Moyano, J. Iriarte (L. García), G. Rodríguez (Lucero), D’Annunzio (Cuervo), Valcarcel y D. Luis.
El técnico rojo era el recordado Rodolfo Carapella, en su segunda etapa. Puso en cancha a: Ballester, Fuster, Colantonio, Testani, Gootfridt (Zalbajaurreguy), Montero, Unger (S. Sarti), Onorato, L. Sarti (Nomdedeu), Taján y Márquez.
El árbitro fue Jorge Moscoso. Ganó Progreso 2 a 1. Los goles los marcaron Márquez para Independiente, empató Valcarcel y definió Lucas Lucero, cuando parecía que iban a los penales.
Roger Soca falleció en el triste 2001 de la Argentina. En un acto de justicia y merecimiento, la Liga Dorreguense de Fútbol decidió que el Torneo Oficial del año 2002 llevara su nombre. (22-09-25).