Violó, prendió fuego a una niña en nuestra ciudad y será candidato libertario en la Universidad Nacional del Sur

El 13 de noviembre la Universidad Nacional del Sur tendrá elecciones para definir futuros integrantes de sus cuerpos de gobierno, como la Asamblea Universitaria (principal órgano de la entidad), el Consejo Superior y los Consejos Departamentales.

Y una novedad generó conmoción: Mauro Emilio Schechtel (44 años), condenado por violar a una niña de 10 años en Coronel Dorrego e intentar borrar el delito prendiéndola fuego, forma parte de una de las listas de candidatos a asambleístas.

Schechtel, como estudiante de Derecho desde la cárcel, integra Libertad UNS, el brazo universitario de La Libertad Avanza. El «Monstruo de Dorrego» aspira, de esta manera, a participar del organismo que toma decisiones estructurales sobre la casa de altos estudios.

El criminal recibió una histórica condena de 40 años de reclusión hace exactamente 14 años, a comienzos de octubre de 2010. El delito había sido cometido en 2008.

Según fuentes universitarias, el puesto 12 en la lista que ocupa Schechtel hace pensar que no tiene chances de entrar a la Asamblea, ya que por el claustro de alumnos ingresan un total de 24 asambleístas y se prevé que Libertad UNS logre 3 o 4 bancas.

De todos modos, ya empezaron a circular repudios por la decisión de incluirlo en una nómina de candidatos, teniendo en cuenta sus antecedentes.

Al momento de la sentencia en su contra, el tribunal sostuvo que Schechtel presenta características «sádicas» hacia menores, que es de «alto riesgo para la sociedad» y que ese perfil «forma parte de sus rasgos de personalidad», ya que «no padece enfermedad mental» y comprende plenamente lo que hace.

El fallo también resaltó que «la niña logró salvar su vida gracias a que el fuego la despertó y pudo caminar aproximadamente unos 400 metros hasta la ruta, mientras caían restos de su ropa casi incinerados; y que en ese lugar se dio la afortunada –en medio de la enorme tragedia vivida por la niña– y por demás encomiable intervención de Fabián Esteban Ullman –la persona que la encontró y salvó–, cuya actitud no merece menos que el más profundo respeto y gratitud de esta judicatura». (Fuente y foto La Nueva.). (01-10-24).